De acuerdo con la Sader, el Atlas tiene la finalidad de ser punto de partida para detectar necesidades de información sobre la apicultura y con ello impulsar el desarrollo de esta actividad
Redacción Agro Orgánico
México. – La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) presentaron el Atlas Nacional de las Abejas y Derivados Apícolas, que compila por primera vez en un único sitio web, información sobre la apicultura en México.
De acuerdo con la Sader, el Atlas cuenta con información desde las características de la miel hasta aspectos relacionados con la actividad económica en torno a las especies domesticadas: crianza de abejas, apoyos gubernamentales y volumen de producción, entre otros, todo ello con el objetivo de cubrir necesidades de información sobre la apicultura y con ello –apuntó la dependencia– impulsar el desarrollo de esta actividad, de manera responsable y sustentable.
En un boletín de prensa, la secretaría recordó que los polinizadores benefician la propagación y producción de más de 60 por ciento de todas las plantas cultivadas, por lo que son fundamentales para la producción de hasta 70 por ciento de los cultivos usados para consumo humano.
Asimismo, los polinizadores están vinculados al rendimiento de al menos 87 cultivos de gran importancia para la alimentación en el mundo.
La Sader señaló que el Atlas surgió de la necesidad de identificar la situación en la que se encuentran las abejas, de las que existen 20 mil especies clasificadas en siete familias. México es hábitat de una amplia variedad de ellas, calculada en cerca de dos mil especies. Más del 85 por ciento de los terrenos apícolas corresponden al tipo de ganadería ejidal.
Dentro del sector apícola, la miel es el principal producto por peso y valor que se obtiene de las colmenas. El segundo en importancia es la cera, seguida del polen, propóleos y jalea real, explicó la Sader.
Además de ocupar un lugar importante en la preparación de alimentos tradicionales, la miel es usada ampliamente como fuente de azúcares para producir vino y cerveza de miel. En las industrias cosmética y farmacéutica se utiliza en productos como cremas, jabones, shampoos y preparaciones medicinales, entre ellas jarabes y tratamientos especiales.
En México, la explotación de las abejas se da principalmente en el sureste del país, en entidades como Yucatán, Campeche, Quintana Roo y Chiapas. Según cifras oficiales, actualmente hay alrededor de 43 mil apicultores en todo el país, registrados en 508 asociaciones ganaderas especializadas en apicultura.
Nuestro país es el octavo productor a nivel mundial y el tercer mayor exportador – después de China y Argentina– con una producción de 57 mil 995 toneladas de miel en promedio por año. La mitad de la producción se consume en el mercado nacional, con un consumo anual per cápita de alrededor de 300 gramos.
En materia de exportaciones, de 2014 a 2018 se enviaron al extranjero alrededor de 34 mil toneladas anuales que generaron un ingreso promedio anual de 124 millones de dólares. Los destinos principales fueron Estados Unidos, Alemania, Bélgica, Arabia Saudita y Reino Unido.
Otro producto elaborado por las abejas es el propóleo, sustancia de composición compleja obtenido a partir de resinas de la vegetación. A este se le adjudican propiedades farmacológicas como bactericida, antiviral, hepatoprotectora, antiinflamatoria, inmunomoduladora, antioxidativa y analgésica.
El Atlas Nacional de las Abejas y Derivados Apícolas puede consultarse en https://atlas-abejas.agricultura.gob.mx