Este proyecto, que cuenta con un presupuesto de 8,6 millones de euros busca implementar estrategias de fertilización optimizadas y crear cadenas de valor en regiones rurales.

Bruselas. – El proyecto RUSTICA H2020 “Demostración de producción circular de biofertilizantes e implementación de estrategias optimizadas de fertilización y cadenas de valor en comunidades rurales” es una iniciativa multidisciplinaria que busca transformar los residuos orgánicos del sector hortofrutícola en novedosos productos biológicos de alta calidad y productos fertilizantes a base de plantas.

El enfoque multidisciplinar consiste en reunir a diferentes actores de diversos orígenes para desarrollar, apoyar y validar el proyecto. A través de este enfoque cooperativo, la ambición del proyecto va más allá de la simple recuperación de nutrientes, y también incluye el desarrollo de alternativas económicamente viables y ambientalmente sostenibles a los fertilizantes minerales con el mismo valor agronómico o mejorado.

Este proyecto, que cuenta con un presupuesto de 8,6 millones de euros busca implementar estrategias de fertilización optimizadas y crear cadenas de valor en regiones rurales. En el proyecto, de 4 años de duración, participan 17 socios de Bélgica, Francia, España, Italia, Croacia, Alemania, Holanda y Colombia.

En una reciente reunión de trabajo, se dieron a conocer los resultados preliminares sobre los análisis realizados para la valorización de diferentes materias primas, además de analizar aspectos clave para el éxito de estas iniciativas sobre el terreno, como el marco legislativo, la definición de modelos de negocio adaptados a las necesidades locales, y las recomendaciones que está elaborando el proyecto con diferentes expertos a nivel internacional sobre futuras políticas y recomendaciones sobre biofertilizantes.

Para esta sesión de trabajo se contó con veintiún asistentes representantes de los diferentes agentes implicados en la cadena de valor, como empresas productoras de biofertilizantes, gestoras de residuos, empresas certificadoras, agricultores y técnicos de campo, así como representantes de la administración pública.

La empresa española Biosabor, como productora de hortalizas ecológicas y consumidora habitual de productos biofertilizantes y soluciones circulares sostenibles con el entorno, está trabajando en la validación del modelo propuesto y en la movilización de agentes para difundir los resultados del proyecto.

El proyecto RUSTICA termina su segundo año de trabajo al final del año 2022 durante el cual el consorcio europeo de 17 socios coordinado por la Universidad de Leuven (Bélgica) ha puesto a punto la valorización de residuos de frutas y hortalizas con cinco tecnologías emergentes con el objetivo de producir biofertilizantes.

Estas cinco tecnologías puestas a punto han sido la producción de ácidos carboxílicos, la producción de biomasa microbiana, la electrodiálisis, la producción de biomasa y de fracción de insectos y la producción de biochar. El potencial nutricional de los productos obtenidos será utilizado junto con las estrategias de fertilización de diversos sistemas productivos agrícolas europeos y las características de diferentes suelos de cultivo para diseñar estrategias de fertilización que serán validadas durante los próximos 24 meses en sistemas de cultivo frutal, extensivo y hortícola bajo invernadero.

En España, estos ensayos nutricionales serán realizados en CT Tecnova, en cultivos bajo invernadero, para validar sobre cultivos de tomate y pepino los efectos agronómicos producidos por los biofertilizantes producidos en el marco del proyecto en términos de productividad del cultivo y la mejora física y nutricional del suelo.

Actualmente y previo a estos ensayos, se están llevando a cabo ensayos de incubación de suelos con los productos obtenidos en dos tipos de suelo procedentes del Bajo Andarax y del Campo de Níjar, tomados como referencia para el diseño de las enmiendas nutricionales del suelo en Almería.

Asimismo, en los próximos meses estará disponible en el Centro Experimental de Tecnova una experiencia piloto de validación de la tecnología de producción de biomasa y de fracción de larvas de insectos como estrategia de bioconversión de restos vegetales en materia prima para la producción de biofertilizantes, a partir de los residuos orgánicos procedentes de los cultivos hortícolas desarrollados bajo invernadero. Esta valorización tecnológica para la producción de biofertilizantes se está llevando a cabo con otro socio español del proyecto, la empresa Entomo Consulting.

Durante el ultimo año de proyecto se capitalizarán los resultados obtenidos en cada región, fomentando el aprendizaje cruzado con otras zonas europeas mediante la realización de visitas cruzadas a otras zonas de producción donde se estén llevando a cabo estrategias de economía circular y de fertilización de cultivos con nuevos productos orgánicos desarrollados a partir de residuos orgánicos vegetales.

Con información de: Fruit Today

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